La celebración anestesiada de Fernando Alonso no tenía nada que ver con la contundencia de su primera frase. «Ganar aquí es como hacerlo en España. No había sentido tanta emoción desde la victoria de 2006 en Barcelona. Ha sido muy parecido e impresionante ver toda la recta de meta con miles de personas y una gran bandera de Ferrari. Es una de las victorias más impactantes de mi carrera».
Después de 53 vueltas de batalla, Fernando Alonso guió el coche hacia el parque cerrado. De nuevo, como en los tiempos de los triunfos, soltó las manos del volante y echó a volar los pajaritos en la vuelta de honor. Luego aparcó y a su lado estacionó su F10 el brasileño Felipe Massa. De pie sobre el morro del coche, el asturiano alzó levemente los brazos y lanzó un amplio saludo a la tribuna. Sólo eso. Nada de puños al aire ni aspavientos, discreción delante de su compañero, que le entregó una simple palmada en la espalda como felicitación. Luego, camino del podio, las bromas del asturiano fueron con el británico Jenson Button. Únicamente en la ceremonia del champán el asturiano vació la botella sobre la cabeza de Massa.
Radiante en la sala de prensa, Fernando Alonso tuvo presente al equipo y su gran actuación en el cambio de neumáticos, clave a la hora de conseguir la victoria. «Ha sido increíble. Tuve el tiempo de tocar los botones necesarios en el volante y cuando metí la primera el semáforo ya estaba verde. La carrera de hoy la han ganado los mecánicos», alabó el piloto.
Después del batacazo de Spa, la Scuderia llegaba muy presionada a su carrera de casa, con Fernando Alonso obligado a ganar para mantener sus opciones en la lucha por el Campeonato. «El fin de semana ha resultado perfecto. Si me piden que haga una película, éste habría sido el final elegido. Parece sencillo salir primero y ganar la carrera, pero la lucha con Button ha sido muy dura», destacó el asturiano, que ya sabe lo que es ganar una carrera en su circuito de casa, pues lo hizo en España en 2006. También había vencido en Monza con McLaren, pero la sensación de llevar a lo más alto a Ferrari en Italia le cautivó. «Como piloto vivir esta experiencia colma muchas de mis aspiraciones».
De principio a fin la actuación de Alonso estuvo llena de momentos calientes. Ya en la salida no pudo evitar que el arranque fugaz de Button le hiciese perder la primera posición. «No es que yo saliera mal, pero la de Jenson ha sido una salida magnífica. Pregunté al equipo y me dijeron que nuestros tiempo de salida fue bueno».
Por ese inicio fulgurante del inglés se vio Alonso luego metido en una pelea cuerpo a cuerpo en la primera chicane. «Nos tocamos, mi coche saltó y en la caída también me topé con Massa. Temí que al coche le hubiese pasado algo, pero después de un par de vueltas vi que todo iba bien», comentó.
Pronto quedó claro que el Gran Premio se iba a decidir a la hora del cambio de neumáticos. Había dudas en cuanto a la estrategia que debían seguir. «Se montó por la radio una especie de debate sobre si teníamos que hacerlo antes o después que Button. Cuando le vimos entrar no nos quedaron opciones. Lo hicieron perfecto y después, a la salida, le vi venir lejos en el retrovisor, pero olvidé que rodaba a 330 por hora y se me echó encima. Fue un momento complicado, aunque la salida había sido peor».
De Italia sale Fernando Alonso reforzado en su pelea por el Mundial. Ahora el asturiano es tercero de una clasificación que es un pañuelo, con los cinco candidatos apretados en 24 puntos, la distancia equivalente a una victoria. «Es difícil recuperarse después de un mal fin de semana. No debemos mirar a los rivales, porque todavía nos somos capaces de dar siempre el cien por ciento. Cuando lo consigamos podremos preocuparnos de lo que hacen los demás. Con este sistema de puntuación hay mucho sube y baja, pero ahora ya no nos podemos permitir un fin de semana malo. En_Monza es cierto que hemos dado un gran salto en la clasificación, pero el podio debe ser el objetivo en todas las carreras de aquí al final del Campeonato», dijo.
El_Gran Premio de Singapur, el próximo día 26, es la siguiente estación del Campeonato, una pista que por sus condiciones no debe resultar desfavorable a Ferrari, aunque los Red Bull de Webber y Vettel parten inicialmente como favoritos. «Van a ser fuertes allí, y habrá carreras en las que tendremos que aceptar otras posiciones que no sean la victoria, aunque vamos a intentar dar el máximo. Lo importante ahora es que estamos en la pelea».