Tras una semana de descanso el «Circo» de la Fórmula 1 prepara su traslado a Melbourne, donde el próximo domingo se disputará la segunda cita de una temporada que tiene a Fernando Alonso como líder tras su victoria en el GP de Bahrein. El GP de Australia, en 2001, marcó el inicio de la carrera del piloto asturiano en la F1, en la que con 17 años, 7 meses y 4 días se convertía en el tercer piloto más joven de la historia en debutar. Fue a los mandos de un Minardi, el coche más modesto de la parrilla, logrando una encomiable duodécima posición al término de la carrera.
De entonces acá Alonso ha disputado en otras siete ocasiones la carrera australiana (no disputó el Mundial de 2002), finalizando en cuatro ocasiones en el podio: primero en 2006, dentro de aquel espectacular inicio de campaña (venía de ganar en Bahrein, como ahora, en la primera cita de la temporada) que le llevó a conquistar su segundo Mundial consecutivo; segundo al año siguiente y tercero en las ediciones de 2004 y 2005, ambas cuando Melbourne marcaba el inicio del campeonato. Un séptimo puesto en 2003 en su primera carrera como piloto de Renault y una cuarta y una quinta plaza en las dos últimas temporadas completan el palmarés del piloto ovetense en este circuito semiurbano.
La del domingo será la primera carrera de Alonso como piloto de Ferrari en el GP de Australia y en la Scuderia llevan desde Bahrein haciendo horas extra para encontrar soluciones al sobrecalentamiento evidenciado por el motor del F10. Además, el director técnico de Williams, Sam Michael, ha señalado a Ferrari como el monoplaza que más combustible gasta y que ésa fue la razón real que obligó a Felipe Massa a ralentizar su ritmo en Bahrein.