A la sombra del protagonista de la jornada, Fernando Alonso rebosaba optimismo. Nunca se hubiera imaginado un desenlace del Gran Premio de España como éste hace unos días. La excursión lejos de Europa había arrojado más dudas que certezas en la criatura roja creada este año por Ferrari.
El F2102 no terminaba de carburar y las primeras posiciones eran una quimera, más expuestas a fenómenos meteorológicos que a lecciones de talento. Tenía que ser en España donde cambiara la tendencia. La primera cita europea del campeonato dejó al Ferrari de Alonso en la segunda posición, con la sensación de que las mejoras aplicadas al monoplaza tienen resultado.
«Enhorabuena a Pastor y a toda Venezuela por esta victoria». Alonso sigue el manual al pie de la letra para felicitar al piloto más rápido en el circuito de Montmeló antes de analizar una posición que deja un gran sabor de boca. «Ha sido una carrera muy especial. El equipo hizo un gran trabajo y he conseguido liderar la prueba en casa, algo muy emocionante y especial. Soy líder del campeonato junto a Vettel y no puedo pedir más. Ha sido un fin de semana fantástico. Gracias a todos los que han venido aquí y por el apoyo de todos los aficionados», comentó el asturiano en la rueda de prensa posterior a la carrera.
«Tiene un sabor a victoria», comentó sobre el segundo puesto final; «Haber recuperado tantos puntos a rivales de la talla de los Red Bull o los McLaren hace que el balance de este fin de semana sea aún más positivo», añadió, sin olvidarse del incidente con Pic que pudo costarle caro: «Ha habido mala suerte con el Marussia. Recibió una penalización, pero la nuestra fue perder la carrera. La gente debe entender que hay que respetar las normas. En todo caso, los Williams han sido más rápidos y merecen la victoria».
Las dudas se ciernen ahora sobre el rendimiento que puede dar el Ferrari en adelante. ¿Seguirá evolucionando el F2012 lo suficiente como plantar cara a los monoplazas más fuertes? «No lo sé, es una pregunta difícil», reconoció Alonso ante los medios; «Necesitamos tener algo de estabilidad para comprobar nuestro rendimiento en las siguientes carreras».
Pastor Maldonado representaba la otra cara de alegría en la jornada. Reacción lógica a una victoria histórica. Maldonado es el primer piloto venezolano que logra imponerse en un Gran Premio. Además, recupera el cetro para Williams después de ocho años sin saborear el primer puesto. La conexión latina volvió a funcionar esta vez. «Es un día inolvidable para mí y para todo Venezuela. Es un placer correr con todo el apoyo de un país que me empuja en todo momento», explicó el vencedor. «No, no he hablado todavía con el presidente Chávez, pero agradezco sus ánimos», añadió en referencia a las consignas lanzadas por el presidente venezolano a través de las redes sociales.