De la extrema igualdad en la que se desarrollaba la actual temporada de Fórmula 1 daban fe dos datos: el primero, que siete pilotos se repartieran las siete primeras carreras de la temporada, lo nunca antes visto en el «Circo»; el segundo, que el líder con mayor ventaja lo hubiera sido Jenson Button (McLaren) cuando tras ganar la primera cita del año, el GP de Australia, superaba en siete puntos a Sebastian Vettel (Red Bull). Ello hasta la irrupción del asturiano Fernando Alonso (Ferrari) en el momento más inesperado: en el GP de Europa disputado el domingo en Valencia, cuando ganaba una carrera mágica después de salir desde la undécima posición de la parrilla y ofreciendo todo un curso acelerado de adelantamientos (hasta diez en pista) en un trazado ratonero como ninguno.
La victoria, la más emotiva sin duda en el palmarés del bicampeón mundial, la única que le hizo llorar de felicidad en el podio, la segunda que conseguía en casa tras la apoteósica de 2006 en Barcelona ante la marea azul de la Alonsomanía, servía para empezar a marcar las primeras diferencias no importantes pero sí destacables en la tabla. El ovetense, el primer piloto que repite victoria este año, aventaja ahora en 20 puntos con su «cavallino» rojo al Red Bull de Mark Webber.
Es Alonso un líder global en el campeonato, pues no sólo manda en la tabla de puntos sino que también es el que más victorias (dos) y podios (cuatro) ha logrado de toda la parrilla. Y ello con un F2012 que no puede presumir de veloz, pues no ha conseguido ninguna pole (segundo en Barcelona como mejor clasificación, y dos veces fuera de la Q3, en Melbourne y Valencia) ni ninguna mejor vuelta en carrera.
Pero en las manos de Fernando Alonso el F2012 sí se ha mostrado un coche fiable, al extremo de que el asturiano es el único piloto que ha conseguido puntuar en las ocho carreras que se llevan disputadas, con dos victorias (Malasia y Europa), un segundo (España), un tercero (Mónaco), dos quintos (Australia y Canadá), un séptimo (Bahrein) y un noveno puesto (China) hasta sumar los 111 puntos que tiene en estos momentos. En siete carreras puntuaron Webber (falló en Barcelona) y Hamilton, que en Valencia quedaba fuera de la pista tras ser embestido por el venezolano Maldonado. Webber y Hamilton, con 91 y 88 puntos, respectivamente, son quienes persiguen en la tabla a Alonso.
El asturiano también es el piloto con mayor peso específico dentro de un equipo, pues ha logrado el 90,9 por ciento de los puntos sumados por Ferrari en la temporada (111 por los 11 de Massa). En el extremo contrario se sitúa Red Bull, líder del Mundial de constructores con 176 puntos que los reparte casi a partes iguales entre sus dos pilotos: 91 de Webber (51,7%) y 85 de Vettel (48,3%).
Con las ocho de este año acumula ya Alonso un total de veinte carreras consecutivas en los puntos, las que van desde el GP de Europa de 2011 hasta el del pasado domingo. Una marca ésta que sólo supera el «rey de las estadísticas» de la F1, el alemán Michael Schumacher, que logró estar 24 seguidas sumando entre el GP de Hungría de 2011 y el de Malasia en 2003. En 19 dejó su cuenta Vettel al abandonar cuando era líder en Valencia tras quedar parado su Red Bull en medio de una recta a vuelta y media del final, sin que desde la escudería austriaca hayan dado detalles del problema.
Descansan estos días los pilotos para preparar un julio intenso con tres citas: los GP de Gran Bretaña (día 8), Alemania (22) y Hungría (29). En Silverstone, siguiente trazado que visita el «Circo», lograba el pasado año el ovetense su primera y a la postre única victoria del año. Ahora llega ya con dos triunfos y como el líder global del año.