El piloto australiano Daniel Ricciardo se llevó la pole en el Gran Premio de México, quitándosela a su compañero de Red Bull Max Verstappen, mientras que el líder y casi campeón del mundo Lewis Hamilton (Mercedes) saldrá tercero por delante de Sebastian Vettel (Ferrari), tras una sesión buena para los españoles con Carlos Sainz (Renault) octavo y Fernando Alonso (McLaren) duodécimo.
Ricciardo apareció un poco de la nada para aguar la fiesta a Verstappen, el más rápido de los libres, en el primer doblete un sábado para Red Bull en la era híbrida. Hamilton se quedó por detrás pero dio un paso al frente después de no estar arriba en los libres, para buscar el quinto Mundial del que le separa un séptimo puesto.
Para el inglés fue un buen día. Y es que si Vettel no gana la carrera, el título quedará sentenciado. Además, el Mercedes del virtual campeón mejoró en el Autódromo Hermanos Rodríguez, después de un viernes de motores Renault en lo alto. Hamilton, que tuvo en Austin el pasado domingo su primera opción de sentenciar el campeonato, podrá vigilar a Vettel.
Además, los rivales a batir serán los Red Bull. Verstappen lo tenía en su mano, pero con la bandera a cuadros llegó rebajando el récord del circuito Ricciardo (1:14.759) para quedarse la pole por 26 milésimas. El hombre de los siete abandonos esta temporada, su última en Red Bull, le dio la bofetada al niño favorito del equipo austriaco con una pole que celebró con un soberano grito en la radio.
Valtteri Bottas (Mercedes) y Kimi Raikkonen (Ferrari) saldrán quinto y sexto, en esa función de equipo, con el Mundial de Constructores más en juego que el de pilotos. A continuación saldrán los Renault, con Nico Hülkenberg séptimo por delante de Sainz.
El piloto español, que fue el tercero más rápido en los libres del viernes, no se encontró cómodo en la sesión cronometrada para sacar mayor provecho de su rendimiento. Siempre pendiente de los neumáticos y un trazado que mejora sesión a sesión, Sainz buscará los puntos desde la octava posición de salida.
Mientras, Alonso logró superar la Q1 con aparente facilidad y peleó en la Q2 hasta quedarse con el duodécimo puesto de parrilla. Una gran vuelta con la que buscar un domingo de puntos, solo uno en las últimas seis carreras, en la recta final del Mundial.