Una pegatina en el caso de Fernando Alonso servía como señal de apoyo a Japón, después del terremoto que sufrió el norte del país, el tsunami posterior y las alarmas que han generado los problemas en algunas de sus centrales nucleares. Se acusa con frecuencia a la Fórmula 1 de vivir aislada de los problemas del mundo, aunque cada vez son más habituales pequeños gestos de solidaridad.
A lo largo del fin de semana, todos los pilotos llevarán el símbolo de ayuda al país nipón. «La Fórmula 1 le debe mucho a Japón. Tendremos también un mensaje en el coche. Todos los que vivimos en el paddock estamos sintiendo su situación sobrecogidos, por lo querido que es aquí ese país. Su Gran Premio se celebra desde hace muchos años y merecen nuestra solidaridad», dijo el asturiano.
Un grupo de periodistas japoneses ha repartido entre las escuderías urnas en las que aceptan donaciones en cualquier moneda del mundo, que enviarán directamente a las organizaciones de ayuda que trabajan en el país. Además, todos los pilotos han pasado frente a las cámaras de la televisión que retransmite el Mundial para Japón y han grabado su mensaje de condolencia.
Pirelli cambia 54 juegos de neumáticos. Por si fuera poco estar en la boca de toda la Fórmula 1 por haber fabricado unos neumáticos que marcarán el desarrollo de las carreras, Pirelli se encontró ayer con un contratiempo que los lanzó de nuevo al centro de los comentarios en el paddock. Veinte juegos de gomas duras resultaron deteriorados por las bajas temperaturas en el avión durante su transporte desde Europa hasta Australia. La marca italiana decidió sustituir toda la partida y entregó a las escuderías un total de 54 juegos de repuesto. «Aparecieron con daños en la superficie y hemos decidido cambiarlos para garantizar su rendimiento», explicaron ayer en un comunicado desde la marca.
Massa lamenta sus discretos entrenamientos. Felipe Massa no pudo acercarse a Alonso en los entrenamientos libres. Solamente fue el séptimo más rápido en la segunda sesión, a siete décimas del asturiano. «Esperaba haber hecho un tiempo mejor, pero los neumáticos blandos tardaban en llegar al momento bueno».
