En los dos últimos años no era raro ver una vez concluida la tanda clasificatoria cómo los Alonso, Hamilton, Button, Schumacher y compañía se acercaban hasta la zona donde Sebastian Vettel había aparcado su Red Bull para echarle un vistazo intentando descubrir su secreto, dónde escondían las alas que le elevaban una y otra vez hasta la pole. El ejemplo más claro de que algo ha cambiado este año en el «Circo» lo ofrecía ayer Vettel, que concluida la clasificación se acercaba hasta los McLaren de Hamilton y Button intentando desentrañar el secreto del MP4-27.
Y es que este año quien vuela es McLaren. Lo apuntaron en Melbourne y lo confirmaron ayer en Sepang, donde las «balas de plata» de Hamilton y Button volvían a copar la primera línea de la parrilla de salida. En esta ocasión con un Michael Schumacher muy cerca, si bien ya es de dominio público que los Mercedes bajan de rendimiento en carrera debido a sus problemas de degradación de neumáticos.
McLaren una vez más en cabeza en tanto para encontrar al Ferrari de Fernando Alonso hay que irse hasta una honrosa cuarta línea. Honrosa porque para lograrla el asturiano tuvo que realizar una única pero perfecta vuelta en la Q3 que le valió para ser noveno, ganando una plaza en la salida debido a las cinco con las que fue penalizado Kimi Raikkonen por cambiar la caja de cambios de su Lotus. Por tiempo, Alonso estuvo por detrás de los dos McLaren, los dos Red Bull, los dos Mercedes y los dos Lotus. Bochornoso para Ferrari.
Las opciones para la carrera de hoy las resumía así el propio Alonso. «Lo mejor sería tener una buena salida, un buen ritmo de carrera y acertar con los cambios de neumáticos. Con ello y si no llueve, pues la lluvia convertiría la carrera en una lotería, podríamos estar entre los cinco primeros». En resumen, que con este decepcionante F2012, cuyo bajo rendimiento quedaba especialmente en evidencia en las dos largas rectas de Sepang, ni soñar con el podio aunque todo salga perfecto. El «cavallino» lleva de momento un trote de burrino, pero al menos el Ferrari evidencia un buen nivel en carrera gracias a que no castiga especialmente los neumáticos en un circuito que se presume sea tremendamente exigente con los Pirelli. En ello confían, y en las manos del ovetense, para obrar otro milagro como en Melbourne.
El asturiano sufrió para entrar en la Q3, ronda que no alcanzaba su compañero Felipe Massa. El brasileño, que ya es historia en Ferrari al ser el piloto que más tiempo lleva sin pasear el mono rojo de la escudería italiana por el podio (la última vez que estuvo entre los tres primeros fue en el GP de Japón de 2010, va para año y medio) logró rebajar a menos de dos décimas su diferencia respecto a Alonso para colocarse decimosegundo en la parrilla. Un puntito en Malasia sería todo un botín para Felipinho.
El único piloto de la parrilla que intentó hacer algo diferente ante la tiranía de los McLaren fue Vettel. Sabedor el alemán de que nada podía en la clasificatoria ante las «balas de plata» se jugó la Q3 con neumáticos duros guardándose un juego extra de blandos para hoy._Decisión arriesgada pero aplaudible. En_Australia aprovechó la salida del coche de seguridad para ganar la posición a Hamilton y ayer arriesgó a sabiendas de que copiando la estrategia de McLaren nunca podrá con los McLaren.
Del resto, destacar la confirmación de que HRT ha dado el necesario salto de calidad para hacerse un hueco en la parrilla. Cumplieron en la Q1 con la norma del 107 por ciento y el español De la Rosa y el indio Karthikeyan disputarán hoy su primera carrera.
En la imagen Vettel observa tras la clasificación el McLaren de Hamilton. | efe
