El GP de Italia suele ser el momento elegido por Ferrari para hacer público el nombre de sus pilotos para la siguiente campaña. En esta ocasión, no. Hace tiempo que se rumorea con la salida de Felipe Massa, pero oficializar ahora su marcha podría restar motivación al piloto brasileño para ayudar a Fernando Alonso en el gran objetivo de la temporada: que el asturiano logre su primera corona a los mandos del «cavallino».
Paralelamente a los rumores de la salida de Massa se plantea la cuestión de quién puede ser el compañero de Fernando Alonso. Y de todos los nombres barajados uno cobraba ayer en Monza una fuerza especial: el del mexicano «Checo» Pérez, que en una sensacional carrera basada en un cambio de estrategia –salió con neumáticos duros para acabar con los medios– remontaba desde la duodécima plaza de la parrilla hasta la segunda posición final, después de adelantar en pista como un tiro, entre otros, a los dos pilotos de Ferrari.
Sergio Pérez Mendoza (Guadalajara, 26 de enero de 1990) se ha convertido con su SauberSauberSauber en una de las grandes revelaciones de la temporada, totalizando ya tres podios (Malasia, Canadá e Italia); pero en SauberSauberSauber corre como cedido, ya que es un piloto cuya ficha pertenece a Ferrari. De ahí que ocupe un lugar especial en las quinielas que le sitúan al rebufo de Alonso.
